The Morning Show narra la historia de la caída en desgracia de un presentador de noticias. Es, sin duda alguna, muy similar al escándalo de conducta inapropiada del presentador Matt Lauer, del programa "Today", de NBC. Al igual que Mitch y Alex, Lauer y Ann Curry (aunque renunció mucho antes del escándalo) eran como la "mamá y el papá de la televisión matutina" para millones de estadounidenses. Aunque la narrativa puede no ser exacta en sus detalles, es bastante fiel al espíritu de los eventos que marcaron un cambio radical en nuestra perspectiva cultural con respecto al acoso sexual, el abuso de poder y el silenciamiento de las voces de las mujeres.
Sin embargo, la mayor parte del drama y la conversación entre los géneros no se trata tanto de la conducta sexual inapropiada como de la política de poder en el lugar de trabajo. Mientras Alex (Aniston) lucha por mantener su posición de poder, los ejecutivos de la red liderados por Cory Ellison (Billy Crudup) intentan capitalizar la situación para reemplazarla con alguien nuevo y valiente, como Bradley (Witherspoon)
El guión tiene buen ritmo y la serie cuenta con muy buen elenco.
El talento de Witherspoon está hecho a la medida para el papel y para Aniston éste es quizás el papel más desafiante en su carrera un perosonaje lleno de luchas internas y externas de su personaje. Crudup se presenta como el astuto ejecutivo de la red, con esa sonrisa triunfante mientras manipula las cosas por detrás. "La gente no quiere noticias ni periodismo; quiere entretenimiento", dice. Gugu Mbatha-Raw interpreta a Hannah Shoenfeld, con un personaje complicado que refleja bastante la narrativa del movimiento "MeToo". Y Steve Carrell sigue sorprendiéndonos y mostrando su gran talento como actor dramático mientras nos muestra la otra cara de humanizar un depredador sexual.
Estoy esperando la segunda temporada. Recomiendo mucho esta serie.
Fuentes: Apple TV y SensaCine.
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