Es muy probable que, si eres vegano o tienes un amigo que lo sea, hayas escuchado preguntas como estas en alguna ocasión: “¿Y dónde sacas las proteínas? ¿No es aburrido comer siempre lo mismo?”. Es posible que incluso las hayas hecho tú. La próxima semana tendrás oportunidad de responderlas por ti mismo sin tener que importunar a tu amigo o amiga vegano y, de paso, tener la oportunidad de mejorar tus hábitos alimenticios. El lunes 15 de junio comienza la Semana Mundial Sin Carne,una iniciativa global que pretende eliminar los prejuicios contra las dietas basadas en vegetales. No te hará falta repetir ni una comida, y tendrás proteínas más que de sobra. Eso sí, vegetales.
La Semana Mundial Sin Carne, que este año celebra su tercera edición, se organiza desde 2018 bajo el paraguas de diversas organizaciones internacionales de apoyo al veganismo y de protección de los animales. Entre ellas están Peta, Igualdad Animal o la organización internacional por la conciencia alimentaria ProVeg. Esta iniciativa está inspirada, según explica a Verne Cristina Rodrigo, directora de ProVeg España, en el Día Mundial sin Carne, un proyecto similar –pero de un único día de duración– que este año ha celebrado su 35 aniversario.
El objetivo de la Semana Mundial Sin Carne, según explica Rodrigo, “es facilitar la información y herramientas suficientes para que cualquiera pueda implementar una alimentación sin productos animales en su día a día”. Al inscribirse al reto a través de la página web de la iniciativa, los participantes reciben dos menús semanales –uno sin restricciones alimentarias y otro sin soja ni gluten– con cuatro comidas veganas diarias y sus recetas correspondientes. Un vistazo rápido ya puede responderte a una de esas preguntas que los veganos están cansados de contestar: la de si no se aburren de comer siempre lo mismo. Ni los desayunos tienen por qué repetirse.
Además de los menús semanales, los participantes también reciben una lista de la compra con los ingredientes necesarios para seguir el menú. Muchos de ellos acostumbran a estar en cualquier casa, se coma la carne que se coma: condimentos, legumbres, arroz... Además, según adelanta Rodrigo, “cada día de la Semana Sin Carne enviaremos una newsletter dedicada a una proteína vegetal en concreto, con información sobre ella, cómo cocinarla o dónde comprarla”. Como el tofu o la soja texturizada.
Rodrigo insiste en que el objetivo de la Semana Sin Carne no es que las personas que comen productos derivados de los animales dejen de hacerlo para siempre y de un día para otro. “Intentamos mostrar que es fácil dejar de consumir carne o reducir su consumo, que hay alternativas y que muchos productos cárnicos se pueden sustituir por otros que no lo son”, explica. En España, según la directora de ProVeg España, “priorizamos mucho la carne en nuestros platos, solemos comer carne con cosas y no cosas con carne. Darse cuenta de esto y empezar a cambiarlo ya es importante”.
El pasado año, una comisión internacional de expertos publicó en la revista científica The Lancet un estudio sobre los cambios necesarios en la alimentación para salvaguardar tanto la salud del ser humano como para preservar el medio ambiente. Entre ellos están reducir el consumo de carnes rojas e incrementar el de verduras, frutas y legumbres.
Cambiar de hábitos alimenticios no pasa estrictamente por convertirse al veganismo. En los últimos años se han popularizado decenas de opciones. Por ejemplo, el flexitarianismo, que consiste en comer carne solo de forma puntual, o el pescetarianismo, en el que la única carne que se consume de forma ocasional es pescado o marisco.
Cristina Rodrigo, de ProVeg, reconoce que el cambio de hábitos respecto al consumo de carne no es sencillo. “En España está muy normalizado, es casi parte de nuestro ADN”, cuenta. Por si quieres animarte a intentar la semana sin carne –o probar a reducir los productos animales de tu dieta– hemos pedido a Rodrigo y al nutricionista Axel Ceinos, profesor colaborador de la Universidad Complutense de Madrid y director de la clínica Nutrición y Cocina, unas pautas para no fracasar en el intento. Estos son los consejos que nos han dado:
- Empieza con objetivos pequeños. Axel Ceinos recomienda ir introduciendo cambios en la dieta de forma paulatina. "Es más fácil fracasar si hacemos cambios de hábitos bruscos", considera. "El consumo de carne recomendado es de 2-3 raciones por semana", explica, "si comes más, el primer objetivo podría ser llegar a ese punto, y si ya estás ahí, reducirlo". Rodrigo enumera otras "pequeñas metas" que ir proponiéndose poco a poco: "Cambiar la leche animal por una vegetal, intentar que una comida al día sea 100% vegana, pedir una opción sin carne al ir a un restaurante…”.
- Olvídate del tópico de las proteínas. "Uno de los problemas más frecuentes que encontramos en la gente que quiere cambiar su dieta es la creencia de que se necesita la carne para obtener proteínas", cuenta Ceinos. "Es un mito: pueden obtenerse proteínas de gran calidad tanto de la leche o los huevos como de productos vegetales, sobre todo de las legumbres".
- Sé previsor. "Hay que aprender a planificar las comidas de forma semanal", explica Ceinos. "Es imprescindible para no acabar comprando cosas que no necesitamos o caprichos y ultraprocesados".
- Anímate a cocinar. “Es mucho más sencillo dejar de consumir carne cuando preparas tu propia comida”, cuenta Cristina Rodrigo. Cuanto más amplio sea el recetario y el abanico de ingredientes que sabes cocinar, más fácil será dejar de consumir carne. Ceinos pone las legumbres como ejemplo: "Estamos acostumbrados a consumirlas en cremas o sopas, pero ofrecen muchísimas posibilidades: como patés, como guarnición, como topping...".
- Recuerda: comida vegetariana no es igual a comida sana. Dejar de consumir carne no te asegura una dieta sana. "En los supermercados ya existen muchísimos ultraprocesados veganos o vegetarianos y, al igual que ocurre con los ultrapocesados cárnicos, es recomendable evitarlos", explica Ceinos.
- Conecta con gente. Evitar los productos animales es más complicado cuando todo el mundo a tu alrededor los consume. “En España el consumo de carne está muy normalizado, por eso es necesario conocer y tener el apoyo de personas que también están dando el paso de dejar de comer productos animales o ya lo han dado”, cuenta Rodrigo. “Así, evitarás tener la sensación de que estás majara”, bromea.
- Infórmate sobre la industria cárnica. “Nos han enseñado que la carne es una cosa que viene envuelta en un plástico y lista para comer pero ¿qué es lo que pasa antes?”, dice Rodrigo. “Tomar conciencia del proceso puede ayudarnos a comprender por qué es necesario no destruir la industria cárnica, pero sí transformarla”.
Aunque a través de la página de la Semana Sin Carne puedes encontrar menús, información y consejos, no es necesario registrarse para sumarse al reto. Puedes seguir una dieta sin carne por tu cuenta o siguiendo cualquier otro menú semanal. Por ejemplo, este que proponía Greenpeace para la Semana Sin Carne 2019 o alguna de las recetas que aparecen en la web internacional de la Semana Mundial Sin Carne (en inglés). También puedes compartir tus progresos y fracasos en el hashtag #SemanaSinCarne o en #WorldMeatFreeWeek. O con tus amigos veganos, que se alegrarán de que puedas ayudarles a responder cuando les pregunten: "¿Pero no os aburrís de comer siempre lo mismo?".
Por Pablo Cantó.
Fuente: Verne
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