Vanesa Martín, con un brillo en los ojos especial, se ponía frente a la cámara en una rueda de prensa muy diferente a la que ha tenido en sus siete discos anteriores. La crisis sanitaria ha hecho que nuestras vidas cambien, que haya que reinventarse. Pero la música, las canciones, los talentos y voces como la de Vanesa... esas fluyen, salvan y superan cualquier barrera.
La artista, con los compañeros de todos los medios vía zoom, ha querido tratar pregunta a pregunta a fuego lento, desgranando cada matiz de este álbum que ha llegado por sorpresa, porque como Martín ha reconocido ''no estaba previsto que sacase disco este año, sino el próximo, por lo que lo hemos hecho con calma y sin presión''.
''Durante el confinamiento me afloraron los sentimientos y me surgió la inspiración y escribimos muchas canciones'', ha dicho. ''Es un disco de fuerza, profundidad. Rutina que antes nos parecía una losa y ahora la cogemos con unas ganas tremendas. 'Siete veces sí' tiene presente, pasado y futuro con más ganas de vivir que nunca. Es un viaje interior y viaje personal. la vida es un caballo a galope y hay que exprimirla''.
El regalo de Sabina
A la pregunta de nuestro compañero Antonio Hueso, sobre la especial relación que tiene con el Maestro Joaquín Sabina, Vanesa ha contado un regalo muy especial que le ha hecho y que jamás olvidará, ni ella ni los fans. ''La vida me ha regalado tener una relación muy bonita con él y con su mujer. De hecho es el primero que tiene el disco en este formato especial. Su música ha sido una gran influencia. De hecho, en una de sus canciones que se llama 'Siete crisantemos' se repite 'Siete veces sí'. Yo tenía claro que quería que tuviera algo de siete y él me dio el permiso y me hizo este regalo. De ahí el nombre del disco''.
''Este trabajo está hecho para el directo, por lo que tendremos que reinventarnos, pero no se va a quedar encerrado en un cajón. Había una gira muy importante organizada, pero ni aunque nos vayan las cosas muy bien con la pandemia creemos que se podrán llegar estadios tan grandes, por lo que nos reinventaremos y adaptaremos aunque haya que hacer dos pases o lo que nos digan, pero directo habrá. Durante el confinamiento tenía muchas ganas de bailar. Me ponía la música a toda voz y me montaba una siesta sola en casa. La música es canalizadora'', explica.
Vanesa le ha puesto todo el alma y corazón, orgullosa de sacarlo en este momento que tanto bien nos hace la música: ''En 3 minutos te pueden llegar mensajes que no escuchas en el día a día. Espero que este disco sea cómplice. La música nos permite tener la cabeza más serena y tener nuestro corazón en equilibrio''.
Feliz y satisfecha
''Estoy feliz con estas canciones y con estos sonidos nuevos y actuales que tiene el álbum. Trabajar con Jose Marín ha sido muy fácil porque nos conocemos perfectamente. Es muy de improvisar en el escenario y ha sido fácil entenderse y saber hacia dónde quería ir. Me veían llegar al estudio escuchando a todo volumen a Dua Lipa o J.Balvin con su disco 'Colores' y ellos ya sabían por donde iba'', ha desvelado.
Y algo que marca el camino y es el punto de partido y origen de Vanesa es su tierra. Muy presente en casa uno de sus pasos y también en este trabajo, como no podía ser de otra manera. Y es que, el alma y el espíritu de Málaga se encuentra en cada poro de su piel, de su vida. La lleva siempre por bandera. ''El álbum es muy malaguita'', ha dicho entre risas. Sin embargo, también reconoce que ''también su álbum más internacional. Se lo han comentado todos los que ya lo han escuchado''.
Durante estos meses Vanesa Martín se ha redescubierto. Una de las cosas que más le gustan, además de hacer música, es la cocina. Ella misma ha reconocido que ''a la vanesa que tenía olvidada es la Vanesa cocinera que en este confinamiento se ha puesto las pilas''. Tan versatil dentro, como fuera del escenario.
Fuente: Cadena Cien
Comentarios